A la hora de mi camino
Jamás visitaré Roma Pedovilla
Pues le he preguntado a mi vecina
Quien desde detrás de Sierra Morena
Ha ido con el Club de los 60
A San Pedro en Roma :
- Y su hija, ¿cómo queda
Después de visitar al Papa
En Roma Pedovilla ?
- ¿Cómo crees tú que quede ?
Preñadita en tierra ajena
Y como su novio es tonto del culo
Y quiere ser en dios casado
Yo le entrego hoy la mano
De mi hija Filomena.
Así que vente a los postres
Que a mi futuro yerno le diré :
- Toma esta linda cordera
Para cuando llegue la Luna de miel
Y le prepares de calostros
La rica cena.
Ya la veo, mi vecino
Montada a su caballo, y a caballo
Gritando como si yo misma fuera :
- Madre, vecinas todas
Que me caso y mi esposo
A su tierra me lleva.
¡Esta noche me la mete entera¡
- Me sentiré, cuando se la lleve
Como si a mi hija desterrara
Y, de nuevo, al convento la mandase
Para que abusen de ella.
- Estate quieto, mi vecino
Que veo que el demonio te intenta
Pues tienes una verga de pastor
A la que tus ovejas pulidas
Le sacan la lengua
Y si ahora tuviese un puñal
Te la cortaría entera.
- Me voy, mi vecina amada
Conmigo va bien guardada
Como si contigo fuera.
- Ay, mi suegra, escuchamos del novio
¡Su hija, doncella y bella
Está, aun catada, muy buena¡
Y de la novia :
- Madre, qué dulces estaban los besos
Pero su penetración asquerosa
Me ha hecho sacar
Hasta la lengua.