Escenario.
Un gran encapsulado color blanco. Dentro trabajan varios científicos.
El Hombre vestido con traje protector revisa unas libretas.
Al abrirse el telón, el Hombre habla.
El Hombre.
En la peor crisis del presente siglo, con cerca de 5000000 de casos positivos y cientos de miles de muertos, los efectos de esta pandemia, aún están en el horizonte. La recesión económica que se vislumbra en el horizonte, dejará el lunes negro de 2008, en segundo plano, y a la gran caída estadounidense de 1929. China se apresta a mandar su divisa, por encima de las demás. Además su poder económico va a ser mayor, toda vez qué concedió préstamos a las naciones del tercer mundo, y a la manera del plan Marshall después de la segunda Guerra mundial, puede aprovechar el escenario para posicionarse como la máxima economía global. Sus contrapartes europeas luchan de forma denodada, y es difícil que salgan pronto de ella. No serían efectivos oponentes. Y Estados Unidos con más de 1.6 millones de positivos, tampoco serían un digno contrincante. Con una plataforma de divisas virtuales, blockchain, el que maneja los hilos de la madeja será el dueño del mundo. Estados Unidos debe dejar el buscar su propia supremacía para retomar el papel de líder, de otra forma el futuro se avizora en manos de los orientales. Después de la pandemia por covid 19, enfrentaremos el mayor desafío económico del presente siglo.
Países como Brasil que enfrentan los severos efectos de una pandemia, deberán encontrar en bolsonaro a un visionario si quieren salir de esta situación bien librados. México se sostiene con las puntas de los dedos por la visión de su presidente. Sin embargo a largo plazo, los países latinoamericanos no podrán sostenerse, si no toman las previsiones desde ahora. Compañías como Astra Zéneca, apuestan a un mercado de la salud muy importante, para ofrecer las vacunas a bajo costo, y el ciudadano promedio del mundo, mira con ojos incertidumbre lo que se aproxima. Quizá como señalaba Toffer en su Tercera ola, estamos en la madeja del tiempo. Quién logre desenredar la, puede adaptarse a la nueva normalidad de un mundo basado en la incertidumbre.
¿Estamos realmente preparados para después de la pandemia ?
(El Hombre toma una libreta y se pone a revisar datos, y el telón cae terminando la obra).